El mundo de la animación ha cambiado. El estilo de dibujo y la técnica de animación de oriente supera ampliamente a la de occidente. Excepto por contados casos, la mayoría de las series de dibujos animados son producidas hoy en oriente. Mayormente, y para sorpresa de muchos, en Corea del Sur.
De estos estudios obtenemos series con claro sesgo americano como "The Simpsons", "Family Guy", y casi cualquier propiedad intelectual de Marvel, DC o Warner Bros..
Sin embargo, el hecho de que los estudios de animación quedaran en oriente (¿será por la mano de obra barata?) nunca supuso el fenómeno que se da hoy en día. Ya a comienzos de la década de los 80's los estudios americanos empezaron a descubrir que les costaba trabajo competir contra las obras de animación japonesas. Cuando en los 90's se levantaron las barreras y las restricciones gracias al fenómeno de la internet, poco hubo que estos estudios pudieron hacer para no perder frente a los gigantes japoneses.
Su astucia los llevó a hacer algo inesperado. Primero intentaron, con distintas medidas de éxito, copiar el estilo japonés, occidentalizarlo, si se quiere. De allí surgen múltiples dibujos de principios de los años 2000. Que se apoyan en la irracionalidad, la fantasía, y estilo artístico tan caraterístico de oriente, pero con temáticas claramente occidentales. Avatar: The Last Airbender y Ben10, son dos ejemplos actuales de este fenómeno.
El hecho de qué parte y en qué forma la cultura pop japonesa fuera absorbida(y los dibujos que se derivan de ella) por diversos grupos etarios, llevó a los grandes estudios americanos a realizar algo inesperado. Comezaron a prestar sus licencias y dejarlas a la libre interpretación de las grandes mentes y artistas de la animación japoneses.
Primero comenzaron con colaboraciones, como pueden ser The Animatrix, Batman: Gotham Knight, o incluso la reciente Halo: Legends.
Animatrix
Batman: Gotham Knight
Halo: Legends
Ahora estamos en la etapa más crítica, la que nos brindará a los grandes fanáticos de los viejos dibujos (americanos y japonenes) la mayor desilusión; o la alegría más grande. Los principales estudios están comenzando a intercambiar las licencias de sus series, y se están comenzando a romper viejas barreras. "Powerpuff Girls Z", o "Las chicas superpoderosas Z" fueron una clara muestra de confianza del talentosísimo Genndy Tartakovsky. El experimento tuvo resultados mixtos, ya que la caracterización femenina oriental difiere mucho de la imagen de inocencia planteada por Tartakovsky en el dibujo original, sin embargo, no puedo sino emocionarme por la posibilidad de un remake oriental de la excelente serie "Samurai Jack".
Marvel también ha hecho lo suyo. Con el relanzamiento de sus reconquistadas franquicias, encargó a un estudio de animación japoneses que llevara a cabo la enorme tarea de producir una serie animada como así también películas animadas sobre las aventuras de Tony Stark. Las películas tuvieron revisiones mixtas, al igual que la serie. Pero confiando en el talento del estudio, ahora también ha confiado una nueva serie de X-men para ser producida y dirigida por ellos.
Iron Man
X-men
Aún no tuve la oportunidad de ver estas series. Pero claramente demuestran un paso gigantezco hacia la occidentalización del oriente y la orientalización del occidente. ¿Y quién sabe? Quizá en el camino encontremos un justo y meritorio punto medio que permitar deslumbrarnos a todos.
Salúdolos
Q2
Pd: Alguien debería sacarle la licencia para dibujar a estos criminales (Si HASBRO y Cartoon Network, los estoy mirando a ustedes).
Pd2: Contrario al comentario anterior, resulta muy recomendable la interpretación de oriente de una clásica historia de occidente como Highlander. Una joyita.
De estos estudios obtenemos series con claro sesgo americano como "The Simpsons", "Family Guy", y casi cualquier propiedad intelectual de Marvel, DC o Warner Bros..
Sin embargo, el hecho de que los estudios de animación quedaran en oriente (¿será por la mano de obra barata?) nunca supuso el fenómeno que se da hoy en día. Ya a comienzos de la década de los 80's los estudios americanos empezaron a descubrir que les costaba trabajo competir contra las obras de animación japonesas. Cuando en los 90's se levantaron las barreras y las restricciones gracias al fenómeno de la internet, poco hubo que estos estudios pudieron hacer para no perder frente a los gigantes japoneses.
Su astucia los llevó a hacer algo inesperado. Primero intentaron, con distintas medidas de éxito, copiar el estilo japonés, occidentalizarlo, si se quiere. De allí surgen múltiples dibujos de principios de los años 2000. Que se apoyan en la irracionalidad, la fantasía, y estilo artístico tan caraterístico de oriente, pero con temáticas claramente occidentales. Avatar: The Last Airbender y Ben10, son dos ejemplos actuales de este fenómeno.
El hecho de qué parte y en qué forma la cultura pop japonesa fuera absorbida(y los dibujos que se derivan de ella) por diversos grupos etarios, llevó a los grandes estudios americanos a realizar algo inesperado. Comezaron a prestar sus licencias y dejarlas a la libre interpretación de las grandes mentes y artistas de la animación japoneses.
Primero comenzaron con colaboraciones, como pueden ser The Animatrix, Batman: Gotham Knight, o incluso la reciente Halo: Legends.
Animatrix
Batman: Gotham Knight
Halo: Legends
Ahora estamos en la etapa más crítica, la que nos brindará a los grandes fanáticos de los viejos dibujos (americanos y japonenes) la mayor desilusión; o la alegría más grande. Los principales estudios están comenzando a intercambiar las licencias de sus series, y se están comenzando a romper viejas barreras. "Powerpuff Girls Z", o "Las chicas superpoderosas Z" fueron una clara muestra de confianza del talentosísimo Genndy Tartakovsky. El experimento tuvo resultados mixtos, ya que la caracterización femenina oriental difiere mucho de la imagen de inocencia planteada por Tartakovsky en el dibujo original, sin embargo, no puedo sino emocionarme por la posibilidad de un remake oriental de la excelente serie "Samurai Jack".
Marvel también ha hecho lo suyo. Con el relanzamiento de sus reconquistadas franquicias, encargó a un estudio de animación japoneses que llevara a cabo la enorme tarea de producir una serie animada como así también películas animadas sobre las aventuras de Tony Stark. Las películas tuvieron revisiones mixtas, al igual que la serie. Pero confiando en el talento del estudio, ahora también ha confiado una nueva serie de X-men para ser producida y dirigida por ellos.
Iron Man
X-men
Aún no tuve la oportunidad de ver estas series. Pero claramente demuestran un paso gigantezco hacia la occidentalización del oriente y la orientalización del occidente. ¿Y quién sabe? Quizá en el camino encontremos un justo y meritorio punto medio que permitar deslumbrarnos a todos.
Salúdolos
Q2
Pd: Alguien debería sacarle la licencia para dibujar a estos criminales (Si HASBRO y Cartoon Network, los estoy mirando a ustedes).
Pd2: Contrario al comentario anterior, resulta muy recomendable la interpretación de oriente de una clásica historia de occidente como Highlander. Una joyita.
1 comentarios:
sos mogolico?
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