sábado, 27 de agosto de 2011

Yo crecí... tal vez...


El otro día me preguntaron de forma ciertamente socarrona si algún día pensaba crecer y dejar atrás mis queridos fichines, comics, y pavadas del mundo ñoño. Debo admitir que no lo pensé mucho y la respuesta fue un inmediato: "No, no pienso dejarlo". Sin embargo con el pasar de los días la fui meditando la idea... acaso esas personas que trabajan en los medios especializados de prensa de videojuegos lo hacen profesionalmente sin un amor particular por estas artes...

Claramente no, mantienen un amor muy particular con el arte de los videojuegos, ya que es uno que puede darte tus sorpresas buenas y malas constantemente, es uno en que el acto de contemplación se ve acompañado de la abrumadora frustración por el fracaso contínuo o por la inexplicable gratificación por el éxito rotundo.

En un arte, en donde las mismas piezas de arte se brindan más a quienes más horas les dedican, así cada uno de nosotros elegirá en qué piezas volcar sus horas para descubrir verdaderamente qué le fascina y cómo hacerlo mejor para alcanzar esa instancia última de ñoñez: el disfrutar jugar y ganar por enésima vez consecutiva el mismo juego sin que deje de ser divertido.

Es un arte, que sin lugar a dudas, TE MARCA, sobre todo si jugaste al DOOM:



Salúdolos


Q2

Pd: El video fue subido a youtube por un periodista de prensa especializada en videojuegos

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